Camino por un bosque otoñal.
La sueve brisa me persigue
me arranco por diversión.
A mi paso caen hojas
se sueltan
se elevan
me rodean
me guían.
Siento el suave viento recorrer mi cuerpo
me envuelve
me abraza
me toma
me maneja
me gira
me suelta.
Caigo en una nube
piso suave, delicado
parece un sueño.
Miro hacia abajo.
El bosque.
Llueve
la nube se desarma
mi sueño se acaba.
No siento el suelo
mis pies están flotando
lentamente caigo
el viento me protege
me envuelve y me hace volar.
Caigo lento, muy lento.
Suave.
El piso de hojas secas de abre
hundo mis manos
atravieso la tierra
me siento nadar
nado en la tierr
aen lo profundo
es cálido pero...
me siento desvanecer
la tierra me adormece
la atravieso.
Al fondo una luz
estoy cerca
muy cerca.
Es húmedo
nado, nado
es agua
un mar de nubes
aves y colores.
Es felicidad.
Vuelo sonriente.
A lo lejos un árbol
en él un ave picoteando sin parar
su ruido es cada vez más fuerte
se hace insoportable.
Tapo mis oídos
no quiero oírlo
que pare!!...
Silencio
no se oye nada
nada.
El pájaro se mueve sin sonar
el viento me rodea sin susurrar
viento frío
me congelo.
Quiero hablar y no me oigo.
Quise detener el tiempo
quise que todo fuese perfecto
pero todo falló
algo salió mal
no lo puedo remediar.
Cuando todo es bello
todo parece ir bien
algo falla.
Fue el sonido
ya no oigo el suave son del viento
ni el cantar de las aves
ni las hojas al caer.
El bosque se hace gris
oscuro
llueve
me hundo
me pierdo.
Despierto.